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Las antípodas de la dimisión

<div style="text-align: justify;"> La vida discurre entre sus capas de cebolla. De forma cuidadosa se disponen para dar sabor al guiso diario que cada uno se atreve a componer. El resultado final tiene mucho que ver con la capacidad del coraz&oacute;n humano de albergar el sabor dulce de la verdad o el repelente de la mentira.</div> <div style="text-align: justify;"> El hombre camina en l&iacute;nea recta cuando apuesta por la verdad, y se pierde en el laberinto cuando la mentira entra en su vida. La verdad adelgaza el peso de nuestras vidas, y la mentira es una carga demasiado pesada. Todos estamos hechos del mismo barro y es humano errar, y m&aacute;s a&uacute;n nuestra generosidad al perdonar. Eso s&iacute;, toleramos mal la perversi&oacute;n de querer confundir &nbsp;la mentira con la verdad y persistir en el enga&ntilde;o. La mentira nunca se convierte en verdad con el paso del tiempo.</div> <div style="text-align: justify;"> El pasado mi&eacute;rcoles, el primer ministro del estado australiano de Nueva Gales del Sur, Barry O&#39;Farrell, present&oacute; su dimisi&oacute;n despu&eacute;s de que se demostrara que minti&oacute; al negar que un ejecutivo de una empresa le regalara una botella de vino por valor de unos 2.170 euros.</div> <div style="text-align: justify;"> Tras conocerse la realidad de los hechos, y funcionar los mecanismos de control democr&aacute;tico, no tuvo otra opci&oacute;n que &nbsp;reconocer su mentira y dimitir.&nbsp;</div> <div style="text-align: justify;"> Seguro que el pol&iacute;tico australiano cuando comenz&oacute; la investigaci&oacute;n no record&oacute; las palabras de mi admirado C.S. Lewis: &nbsp;&ldquo;Una peque&ntilde;a mentira, es como un peque&ntilde;o embarazo , no pasar&aacute; mucho tiempo antes de que todos se enteren.&rdquo;</div> <div style="text-align: justify;"> En nuestras ant&iacute;podas, la mentira no tiene sitio en el ejercicio de las responsabilidades p&uacute;blicas. La sociedad australiana muestra el camino a sus pol&iacute;ticos.&nbsp;</div> <div style="text-align: justify;"> &iquest;Qu&eacute; nos ocurre a nosotros? &iquest;Por qu&eacute; toleramos el enga&ntilde;o y la ocultaci&oacute;n en el desempe&ntilde;o del ejercicio de lo p&uacute;blico? &iquest;Por qu&eacute; caben en una cuartilla los nombres de los pol&iacute;ticos que han dimitido en nuestra joven democracia? Nuestra sociedad entr&oacute; en crisis cuando nos acostumbramos a acercarnos a la verdad con palabras falsas que adulteraron nuestras vidas. La mentira est&aacute; demasiado extendida y muestra m&uacute;sculo en muchos &aacute;mbitos de nuestra sociedad, de ah&iacute; que los pol&iacute;ticos se encuentras en territorio amigo.&nbsp;</div> <div style="text-align: justify;"> Nos merecemos que nuevos caballeros andantes se atrevan a deshacer tanto entuerto y la verdad pueda seguir siendo la opci&oacute;n preferida.</div> <div> &nbsp;</div>